Primera estación:
Bariloche.
El 7 de enero de 2014 partimos de Buenos Aires en tren rumbo
al sur, concretamente a San Carlos de Bariloche, provincia de Río Negro,
Argentina. Tras 4 días de viaje realizando diferentes escalas, llegamos a esta
ciudad adornada por hermosos paisajes que engloban lagos, bosques, montañas,
nevados y miles de turistas de todo el mundo, que aprovechan el verano sureño
para disfrutar sus vacaciones con paseos dentro y alrededor de la ciudad. Así
era como paseando por el Centro Cívico a partir de las 19:00 y hasta la 1:00 se encontraban con espectáculos callejeros “a
la gorra” de todo tipo: payasos, danza, humor, malabares, fuego, monociclos con
grupos de todo el país y por supuesto magia y asombro a cargo de Tómbola Seis.
Desde el 11 de enero y hasta el 2 de febrero presentamos funciones diariamente en
Bariloche, y los miércoles y domingos en la feria de Colonia Suiza a tan sólo 1hora
de la ciudad. A pesar de la fuerte temporal que presenta el sur, corrimos con
la suerte de tener días hermosos que no permitieron que bajáramos la guardia
con las funciones, puesto que el público esperaba cada tarde encontrarse con
ésta jornada artística que se desarrollaba en Bariloche y nosotros estábamos
con todas las ganas e intenciones de provocar en ellos ilusiones de tal nivel
que los dejaran con los pelos de punta. “¿Cómo
lo hizo?, ¿pueden hacerlo otra vez? ¡No lo puedo creer, es imposible!” Eran
algunos de los comentarios o preguntas que llegaban a nosotros después de
terminar cada función, a lo que respondíamos: “Por hoy, éste espectáculo ha terminado, si lo que han visto es
realidad o ilusión, ustedes lo decidirán”.
Fuimos invitados a la carpa de circo que cada verano se
levanta en El Bolsón (120km al sur de Bariloche) y funciona también como el
Centro Cultural Galeano, más conocida como “La carpa del Galeano” donde cada
noche se desarrollan diferentes tipos de actividades lúdicas para el público
local y visitante de esta ciudad; en la noche de los martes se realizaba la
“Varieté Viajera” de la cual fuimos partícipes el 4 de febrero cerrando dicha
actividad.
Sólo bastaba cruzar la cordillera de Los Andes y a tan sólo
4 horas de distancia ya estábamos en Chile.
Fuimos directo a Puerto Montt, la última ciudad a donde se puede llegar
por carretera (pues de ahí hacia abajo sólo quedan islas) y allí nos
encontramos con el océano pacífico y un mar por supuesto, de personas muy
amorosas. Como nuestro paso iba a ser breve estuvimos 3 días allí y luego nos
dirigimos a Valdivia y Villarica igualmente en el sur ciudades rodeadas también
de lagos, montañas, turismo, buenos amigos y exitosas funciones.
Cerca del final de
nuestro viaje nos dirigimos más hacia el norte: Valparaíso y Viña del Mar,
donde esperábamos encontrarnos con algunos amigos que habíamos conocido en
Bolivia y así fue como llegamos a la casa de Petu, Fepo y el Chato payasos del
Festín de la risa y del Teatro Museo del títere y el payaso de Valparaíso. Y
con ellos compartimos los últimos días de éste verano cargado de magia en la
calle, maravillosos paisajes y muchos buenos amigos.
De vuelta en Buenos Aires, comenzamos una nueva etapa,
nuevos planes, nuevas ideas y proyectos y con expectativas de continuar esta
etapa mágica de nuestras vidas.
La Tómbola gira y
sigue girando aquí o allá veremos que nos depara la buena fortuna…